Friday, July 09, 2010
Dogs and Dog biscuits.
Howler monkeys, in the wild, spend about 15 hours a day sleeping. The rest of the time they are eating. Our monkeys rise at dawn and give their thunderous territorial song. They have a set breakfast and dinner time, when food is provided. They do not have to spend time foraging for food whilst their kin in the forest spend most of their waking hours eating and searching for food. Our children sleep for an hour mid day. The rest of the day, they sunbathe or play wild games chasing each other. Jumping in the hammock and racing around the bamboo walkway. They retire at about five in the evening. Wild howlers are not known to interact with other animals. The Howler in semi captivity might almost be different animal. Our picture shows Marco playing with a puppy. His wife, Emma is also there but slightly out of focus.
In semi captivity, howlers learn a whole new group of activities. Their innate drives are still evident but modified by the contact with humans. We see them at play on swings. We see them cleaning their teeth with a tooth brush.
They are careful but adventurous. For example they will test a new food by touching it with their tongue. They have a built in Gas Chromatograph with which they can tell good to eat. For example they will do this before devouring a dog biscuit, making happy noises as they do so. All our monkeys love dog biscuits.
Photograph of Marco playing with the dog by courtesy Gabriela.
Photo of MonaLisa cleaning her teeth.
Viernes, 09 de julio 2010
Los perros y las galletas para perros.
Los monos aulladores, en la naturaleza, pasan unas 15 horas al día durmiendo. El resto del tiempo ellos están comiendo. Nuestros monos se levantan al amanecer y dan su canto territorial atronador. Tienen su servicio de desayuno y de cena, cuando la comida se les ofrece, ellos no tienen que pasar tiempo buscando alimentos, sus parientes en el bosque pasan la mayor parte de sus horas de vigilia comiendo y en busca de alimento. Nuestros niños duermen durante una hora al mediodía. El resto del día, toman el sol o con sus juegos salvajes persiguiéndose. Saltando en la hamaca y corriendo por el pasillo de bambú. Se retiran a las cinco de la tarde. Los aulladores salvajes no se sabe si interactúan con otros animales. Los aulladores en semi cautiverio si lo hacen con diferentes animales. Nuestra foto muestra a Marco jugando con un cachorro. Su esposa, Emma también está ahí pero un poco fuera de foco.
En semi cautiverio, los aulladores aprenden un nuevo grupo de actividades. Sus impulsos innatos son todavía evidentes, pero modificados por el contacto con los humanos. Los vemos en el juego en los columpios. Se les ve limpiando sus dientes con un cepillo.
Ellos son cuidadosos, pero aventureros. Por ejemplo se pondrá a prueba un nuevo alimento cuando lo tocan con su lengua. Ellos últimamente han comido galletas para perros y lo extraño es que le gustan mucho y hacen sus sonidos de disfrute cuando comen algo agradable para ellos.
Fotografía de Marco, cortesía de Gabriela.
Foto de Monalisa cepillándose los dientes.